Ni Aragua, ni Zamora, ni Carabobo, ni Italchacao, ni Monagas, ni Mineros, ni UAM, ni Anzoátegui… Tampoco más recientemente Lara ni Trujillanos. Hoy tuvo el Caracas la oportunidad de terminar con la mala suerte de los equipos venezolanos en Copa Suramericana. Pero tampoco pudo ser.
Mal partido en el Olímpico. Si bien en el primer tiempo el rojo pudo haberse puesto en ventaja, chocaba con un Independiente que vino a sacar un empate y a hacer bueno el 2-1 que consiguió en la ida. Poco que destacar. Sólo se vio un Caracas que se esforzaba en intentarlo, pero al que no le alcanzaba. Un partido que acaba sin goles. Y es que a este Caracas le ha costado conseguir dianas en los últimos partidos que ha disputado.
Pero el leitmotiv de mis reflexiones en el camino de regreso del estadio no fue tanto el partido que acababa de ver. Sino que esta vez sí está la mesa servida para entonar el réquiem que no me parecía que tuviera lugar cuando cayeron Lara y Trujillanos. En aquellos momentos se trataba de instituciones incipientes que debutaban en copas. Trujillanos tuvo una muy mala noche en Huila en un momento en que se encontraba fuera de forma, dado que el apertura venezolano no empezaba. Lara nos dio una alegría al vencer en casa a Independiente de Santa Fe, pero luego fue a Bogotá a encajar cuatro. Falta de experiencia y de rodaje internacional pueden ser los factores a considerar… En ese momento Lara iba bien abajo en la tabla… Lo cierto es que no me parecía que había que entonar ningún réquiem. Hasta hoy. No había excusas. Era el campeón nacional. Claro, es notorio que no es el mismo equipo de la temporada pasada, pero era la esperanza más realista de que un equipo venezolano superara por primera vez alguna eliminatoria de la Copa Suramericana ante un equipo extranjero.
Que el Caracas no haya podido es alarmante. ¿Por qué el campeón nacional no ha podido salir adelante esta vez? Tal vez nuestros equipos no saben jugar eliminatorias de ida y vuelta. Resucitar la Copa Venezuela fue una buena idea para que tomáramos esa costumbre, pero nos ha costado aprender. Preocupante es ahora que uno de los cupos venezolanos a esta competición vendrá de la disputa de un octogonal inventado entre los equipos que culminen del cuatro al undécimo en la tabla acumulada. ¿Será que la fórmula para el éxito en Copa Suramericana es que enviemos los tres primeros? Bueno, eso sería admitir que nos cuesta mucho en el concierto internacional, porque en esta Copa compiten muchos equipos que secundan a las ternas de honor de los campeonatos vecinos. Si tenemos que enviar a primeros y segundos a competir con cuartos o quintos… Algo anda mal.
Retomo ahora una frase que ya escribí anteriormente: Este no es el mismo Caracas de la temporada pasada. En este momento no se puede decir que es lo mejor de nuestra liga, porque queda en evidencia que no se reforzó bien. Dejó salir fichas claves y no las sustituyó con incorporaciones de parecido cartel. Si bien es loable que lo intente con los jóvenes, hay que recordarles que son jóvenes. Se les está exigiendo demasiado. Muchos apuntalan equivocadamente, a mi modo de ver, a Ceferino Bencomo. Y es que el DT caraqueño está en una situación en la cual no puede hacer mucho más, porque tiene menos herramientas que en el pasado reciente. Pareciera que el Caracas FC quisiera echar esta temporada a pérdida para dar tiempo a que se consolide la juventud que abunda ahora, pero eso tienen que decírselo a sus hinchas, que esperan de su equipo una mejor participación internacional y no lo que se está viendo… Y también a quienes no somos sus hinchas, porque la bandera de “lo mejor del país” es algo que debe ser tomado con seriedad. Representan a Venezuela en dos torneos internacionales por encarnar la esperanza de hacerlo mejor, pero… ¿Tienen en mente otra cosa? ¿Es el objetivo la consolidación de los jóvenes por encima de sacar la casta por Venezuela en Suramericana y Libertadores? Que se sepa. Por que el país entero puso sus esperanzas en el rojo y no se vale defraudar.
Quiero terminar abriendo una ventana de esperanza: Veamos quién sale campeón ahora. El Caracas va cuarto en el apertura. Hay equipos que lo han hecho mejor hasta ahora, por lo tanto, otro once pudiera representarnos de mejor manera (amén). Me gustaría ver en Copa Suramericana al actual Real Esppor o al Deportivo Táchira. Para ello habrá que esperar un año a que inicie la edición 2011 de la Copa Suramericana, porque en la actual ya Venezuela quedó fuera. Amanecerá y veremos, ya que han pasado muchos años en esta competición en que Venezuela es un invitado clandestino… ¿Mejor que sea ClanDIEZtino? ¡No! ¡Qué sea protagonista, por el amor de Dios!
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